jueves, 18 de diciembre de 2014

LA RARA DESPIERTA

LA RARA DESPIERTA
Había una vez una princesa que vivía en un castillo muy muy bonito. En el castillo vivíamos seis personas! La reina Kristina, el Rey Jon Ander, la princesa Ane, el príncipe Aitor y yo la princesa Nerea. La reina era muy guapa tenía ojos azules y pelo castaño, el Rey también era guapo tenía ojos marrones y pelo rubio. La hermana mayor Ane, tenía ojos verde-marrones y pelo rubio, el hermano ojos azules y pelo negro y yo ojos marrones y pelo marrón.

Yo nací la más rara porque cuando nací mi padre montó una fiesta y no le invitó al hada preferida de su hija porque le Rey sospechaba algo de ella. Entonces cuando se enteró que no estaba invitada se enfadó y decidió hacerle daño donde más le doliera: su hija. Entonces fue a la fiesta y le dio el regalo a la hija pero cuando lo abrió salió un muñeco que sacaba veneno y que te convertía muy rara y no muy normal. A mí todo esto me contaron cuando tenía 10 años. Esos momentos los pasé muy mal.

Para que se me quitara el veneno tenía  que ir al “BOSQUE PERDIDO” a por una mandarina roja y peluda, o sino moriría cuando tuviera 17 años. Todo el reino se puso a buscar el bosque perdido. Pasaron años y años pero no lo encontraban. Y cuando solo le quedaba un año de vida a la princesa y ya estaba volviendo los soldados hacia el castillo, en el sitio más inesperado, encontraron el bosque perdido. Se dividieron en dos grupos para hacer la búsqueda más fácil.

Todos estaban muy nerviosos porque cada vez le quedaba menos tiempo de vida a la princesa, se pusieron en marcha y entraron en el bosque. El bosque daba mucho miedo, estaba muy oscuro y se oían ruidos de lobos, hipopótamos, monos, cerdos...etc.
Apenas solo quedaban 6 meses y los soldados buscaban y buscaban la mandarina roja y peluda, pero no la encontraban. Seguían caminando y caminando, y uno de los soldados preguntó:

-Señor Rey podemos descansar un poquito? El Rey le respondió:
-Cómo? Vas en serio? Mi hija está a punto de  morirse y ahora quieres descansar!!

Entonces el Rey enfadado dio una patada al soldado y le tiró por un barranco;todos los soldados estaban muy nerviosos porque pensaban que el Rey también les echaría a ellos, siguieron caminando y vieron una cosa que brillaba y dijo un soldado:

-Señor Rey ¿Qué es esa cosa que brilla ahí al fondo??

Todos empezaron a correr hacía ahí y cuando estaban llegando no podían casi ni abrir los ojos porque brillaba mucho; cuando el Rey se dio cuenta de que habían encontrado la mandarina roja y peluda la cogió y se fue corriendo al castillo para dársela a su hija. La princesa estaba muy mal, casi ni podía andar, su padre le dio la mandarina y al comerla se quedó dormida. Cuando se despertó se sentía muy bien y podía andar, empezó a bailar de contenta y toda la familia le siguió.


Y COLORÍN COLORADO, ESTE CUENTO SE HA ACABADO!!


                           FINN!!!!

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