CAPERUCITA
*MODERNA*
Hace unos días fue el décimo octavo cumpleaños de caperucita roja. Los padres de caperucita le hicieron un regalo muy especial: le regalaron un Zentorno (un coche).
Le regalaron muchas cosas más: una nueva capucha, un bolsito, un IPhone 6+... pero por desgracia su abuela no pudo ir. La pobre anciana estaba muy enferma.
Caperucita se sentía triste porque su abuela no pudo ir a la fiesta.Y al momento caperucita cogió un poco de vino del que le gusta tanto a la abuelita, unos bollos de la pastelería de
Adarraga, jamón serrano, las llaves del coche y se fue directamente a la autopista
camino de la casa de la abuelita.
Pasó por un pueblecito, y se encontró con un lobo grandullón.
- ¿A donde vas mona? y ¿Qué es eso que huele tan bien? - preguntó el lobo -
- Voy a casa de mi abuelita y llevo vino, bollos de la pastelería Adarraga y
un poco de jamón serrano - contestó caperucita -.
El lobo para entretenerla le dijo:
- Por la la calle 123 hay un supermercado del corte inglés.
- ¿A si? Pues me voy pitando.
- Y, además he oido que hay descuentos de primavera.
Caperucita dio la vuelta y creyéndose lo que le dijo el lobo, se dirigió a la calle 123 .
El lobo aprovechó para ir a casa de la abuelita y en el camino pensó como comería a la
abuelita, ha caperucita, el vino, los bollos y el jamón serrano .
- Primero engañaré a la abuelita y cuando llegue caperucita la engañaré y la comeré junto al jamón serrano, el vino y los bollos igual que a la abuelita - pensó el lobo. Para cuando acabó de pensar había llegado a casa de la abuelita.
El lobo la engañó y le dijo:
- Abuelita soy yo caperucita.
La abuelita se dio cuenta de que no era la voz de caperucita y cogió una escopeta y le dijo que entrase.
Cuando el lobo entró en casa se encontró a la abuelita con una escopeta. Pero como la abuelita estaba débil no pudo disparar y el lobo se la tragó de un bocado. El lobo para que se le hiciese más fácil engañar a caperucita cogió la ropa de la abuelita, se la puso y se metió en la cama de la abuelita .
Cuando llegó caperucita a casa de la abuelita un poco decepcionada tocó la puerta y gritó:
- ¡Abuelita!
- ¿Quién es?-dijo el lobo.
- ¡Soy yo caperucita!-contestó caperucita.
- ¡Pasa, pasa!¡Que la puerta esta abierta!
Caperucita al entrar preguntó:
- Abuelita, abuelita cuánto pelo tienes.
- Es para estar calentita.
- Abuelita, abuelita que orejas mas grandes tienes.
- Son para oirte mejor .
- Abuelita, abuelita que ojos mas grandes tienes.
- Son para verte mejor.
- Abuelita, abuelita que nariz mas grande tienes.
- Es para olerte mejor.
- Abuelita, abuelita y que boca mas grande tienes.
- ¡Es para comerte mejor!
Y se la tragó de golpe a caperucita.
El lobo despues de comerse toda la nevera quería echarse una siesta. Entonces se tumbó en la cama y se durmió.
Por casualidad estaba pasando un agente del F.B.I que estaba vigilando las calles. Y como se aburría mucho pensó en pasar por casa de la abuelita. Cuando entró en casa de la abuelita vio al lobo y pensando en que a lo mejor se había comido a la abuelita sacó su navaja y le abrió la tripa.
Cuando le abrió la tripa al lobo salieron caperucita y la abuelita. Ellas le dijeron:
- Muchas gracias señor agente.
- Ya lo creo -dijo la abuelita
- No hay de que, pero ¿qué hacemos con el lobo? -preguntó el agente.
- Mmm…¡Ya lo se! -gritó caperucita.
Caperucita cogió unas piedras y las metió en la tripa del lobo. Luego cogió hilo y unas agujas y cosió la tripa del lobo.
El lobo se despertó y al ver al agente del F.B.I intentó escapar. Pero por culpa de las piedras no pudo moverse y cayó desplomado.
COLORIN COLORADO ESTE CUENTO SE HA ACABADO
*FIN*
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